
El volumen está sobrevalorado
Los que crecimos en el triatlon leyendo las míticas semanas de entrenamiento de 40 horas del grupo de los Big Four (Scott Molina, Mark Allen, Dave Scott y Scott Tinley) nos imbuimos en la creencia de que es necesario meter grandes kilometradas semana tras semana para conseguir el mejor resultado posible.
Si a esto le sumamos la teoría de las 10.000 horas de Gladwell en su libro Outliers, que dice que esa cantidad de práctica es necesaria para ser un maestro en algo, y le añadimos que la mayoría de los grandes deportistas entrenan muchísimas horas (no siempre el éxito y el volumen tienen una relación de causalidad) tenemos el caldo de cultivo perfecto para que la religión del «machaquismo» se convierta en dogma.
Pauli Kiuru revoluciono esas creencias pasando a hacer semanas de 25 horas de alta intensidad siempre guiado por el pulsometro, dando la sensación de que 25 horas eran «pocas»
Exceptuando las horas de entrenamiento «invisible» (masajes, estiramientos, alguna siesta furtiva…) un profesional que dedique 25 horas al entrenamiento rondará (con las lógicas y necesarias variaciones entre individuos y necesidades de la temporada) los 20.000 metros de agua, 400 kilómetros de bici y y 90 kms de carrera, y un aficionado que entrene 15 horas semanales hará 10.000-250-40. Por encima de ese volumen dudo mucho que se este logrando ninguna adaptación que no sea perdida de peso y sí estaremos quemando a nuestro deportista. Los más duros aguantaran sin lesiones, pero antes o después casi todos terminaran aflojando; Si no se lo pide el cuerpo se lo pedirá la mente
Sin embargo, en el deporte de resistencia, lo que nos hace mejorar es la asimilación de las cargas duras, y esta asimilación se ve muy dificultada si consideramos que un rodaje de 4 horas suave en bici o salir a correr 1h10 tranquilos después de un día de series son entrenamientos «REGENERATIVOS». El concepto de equilibrio entre sacrificio y descanso no suele ser bien entendido por parte de ningún colectivo de deportistas de largo aliento, y en muchas ocasiones preferimos salir a rodar con dolores y malas sensaciones a unos ritmos que no suponen apenas desarrollo de nuestras cualidades a quedarnos en casa descansado.
Evidentemente, en deportes como el triatlon, el desarrollo de las capacidades aerobicas es vital, y no se comprende que esto no ocurra sin un volumen mínimo de entrenamiento, pero tanto profesionales como aficionados tienden a machacarse en exceso; Algunos de los primeros se fustigan con semanas de más de 25 horas combinadas con alta intensidad, y los segundos no comprenden en ocasiones que los compromisos familiares y profesionales conllevan un desgaste que hace que superar las 15 horas ocasione un alto estres motivacional y físico para el organismo.
No llegar en forma a un triatlon es casi imposible: El entrenamiento cruzado hace maravillas en los aficionados, y los profesionales entrenan tan duramente que lo mejor que les puede pasar en ocasiones es cogerse un resfriado 6 semanas antes de la competición para evitar llegar pasados de rosca. Sin embargo, muchos entrenadores aun creen que es aceptable que por «SACRIFICIO» un triatleta se pase de rosca, pero es inaceptable que este se quede al 95%.
La continuidad de una temporada de 45-50 semanas anuales sin lesiones y con sus correspondientes ciclos de carga y descanso (y no solo a nivel físico, sino también mental) es la clave para alcanzar nuestras mejores marcas, y si una semana «solo » hemos corrido 15 kilometros, y estos han sido a un nivel bueno que nos indica que nos estamos moviendo a las velocidades que demandamos a nuestras exigencias, pero hemos metido otras horas de volumen nadando y en bici, no deberiamos sorprendernos de llegar a la siguiente competición y ver qué estamos corriendo bien.
Aprended a diferenciar entre pereza y cansancio, y discernid cuando es mejor saltarse un entrenamiento que obligarse a hacerlo.
Chapeau!!!
muy bueno…tomarse un dia de descanso no va mal de vez en cuando.
Tienes más razón que un santo. La mayoría de nosotros no somos profesionales, a partir de ahí, hacemos deporte para DISFRUTAR por lo que lo más recomedable es salir a entrenar con buenas sensaciones y sin dolores (que nopequeñas molestias). Comer bien y descansar y dejar de mirar los km recorridos, sino intnsidades y ritmos creo que son la clave.
Un buen costipado a tiempo es lo mejor…. Sobre todo para los aficionados, que normalmente nos sobre-entrenamos porque el Stress y la falta de tiempo tambien suma en el desgaste.
Gran entrada!!!
Muy buen artículo Jaime.
Muy, muy bueho Jaime, se lo invitaré a leer a mas de un «entrenador» de la isla.
Nada mas que añadir, todo queda dicho con este artículo.
Amén!!!
Genial reflexión / recomendación!!!
Pero también hay que ver el «coste oportunidad» de algunos de esos entrenamientos.
Está claro que algunas veces forzamos más de la cuenta para entrenar como sea (sobrecarga innecesaria, entrenamiento no estando en las mejores condiciones, etc.) y eso puede ser un error por todo lo que has comentado pero es que, otras veces, es casi un «ahora o nunca» y cuando no te dedicas a eso y no puedes buscar un “momento mejor”, pues nada, se hace cuando se puede y como se puede.
Posiblemente, ese entrenamiento “no recomendado” no sea lo mejor para mejorar tu rendimiento o forma física pero si es bueno para los muchos otros factores que puede haber alrededor de esa “necesidad de entrenamiento” (desconectar del día a día, hacer un poco de movimiento diario, etc.), pues es posible que ya no sea tan poco recomendable.
Como casi siempre, lo mejor, el punto medio: ni mucho ni poco… pero es que es tan difícil de medir dónde está ese punto medio… 😀
joder Jaime, porque no me di cuenta antes?
totalmente de acuerdo.
Muy buena reflexión, todos nos damos cuenta demasiado tarde…
Esta misma tarde iba pensando en el coche sobre el tema,hay que pensar lo que somos y sobre todo,donde estamos.
Si hay que dejar un día(como hoy) de entrenar no pasa nada,y sobre todo no hacer al día siguiente lo de los dos días
Buen artículo!!! y muy interesante, sobretodo para los populares como yo!!!
Chapeau!!!!
Muy bueno. Y muy difícil de hacer lo que apuntas en la última frase, el que sea capaz de hacerlo se conoce muy bien a sí mismo. Puedes llevar años entrenando y aún no llegar a distinguirlo hasta que no han pasado 15′ de sudores.
Yo creo que los deportistas en general nos complicamos mucho las cosas.
Yo y solo hablo por mi. En invierno que es cuando tengo tiempo hago todo lo que puedo, si en algún momento me encuentro saturado ( no muy saturado), aflojo hasta sentimme otra vez dispuesto a todo.
A partir del momento que empieza la temporada de trabajo, miro las horas que tengo libres, y decido las que puedo dedicar al deporte sin que por ello perjudique al trabajo ni a la familia. No hay más, yo lo veo asi de simple. Puede que haga bien o no, pero es lo que hay.
De todas maneras, tampoco pretendo hacer un IM ni un triple olimpico, en setiembre o octubre por poner un ejemplo si se que desde mayo a agosto, sacar 12 horas/semana sin perjudicar lo demás es un milagro.
audos.
El libro es una pasada. Y tu reflexión acertada.
Menuda semana de consancio que llevo, ¿o es pereza? Excelente post!!!
Entre nosotros… echaba de menos una entrada como esta.
Una cosa más. La diversión, cómo es que no se tiene en cuenta en los entrenos?
Gràcies Jaume.
pd: tomo nota del librico.
Completamente de acuerdo. No me bastaron las peleas contigo el año pasado, tuve que carbonizarme para verlo yo mismo. Ahora ya tengo la lección bien aprendida. Sin embargo, sigo creyendo que el volumen tiene importancia el primer año que haces larga distancia, aunque solo sea con el fin de generar la confianza suficiente en que puedes con las distancias. Seguramente no en elite pero si en GGEE y ‘populares’.
Me quito el sombrero. ¡Muy buen post!
Me parece una reflexion buensima…
En mi club, hay tio que son bastante mejores que yo en teoria y sobre todo entrenando, ya que hacen una burrada de kms…. Pero resulta que en las competiciones muchas veces acaban petando… Por que será??jeje..
Saludos y sigue asi crack..
En mi caso.. seria casi dejar de ser triatleta… es dificil compaginar todas las facetas, trabajadora, madre, triatleta.. seguiremos buscando tiempo para seguir con todas ellas.. pero es muy dificil..
Muy buen documento.
Gran entrada. En el triatlón casi todos nos machacamos sin conpasión. Pero creo que aun es más exagerado en el mundo de los maratonianos. Alucino de ver los «rodajes» que se meten algunos amigos que correrán en Barcelona este domingo. Yo estoy convencido que con algún km. menos llegarían mejor.
genial!
muy bien explicado
coincido con todo
Hola Jaime,hola chicos
Os dejo un enlace de mi entrenador Atilla Ozkan!!
Publica articulos muy interesantes sobre entrenamiento!
Aqui teneis: os rcomiendo un vistazo!
http://trainwithatieli.blogspot.com/2011/03/el-control-de-entrenamianto-de-la.html
Por cierto te sigo y encuentro interesantes tus publicaciones!!
Aqui teneis mi blog gracias! Si jo te importa te anyado a mi lista!
aitor-alejandre.blogspot.com
Saludos!
Totalmente de acuerdo. También creo yo que el problema es que para mucha gente, a veces es más fácil y encima aplaca más la conciencia hacer una hora de rodaje que series de 400 m.fuerte. ;).
Muy bueno, todos nos vemos reflejados en algun aspecto de los mencionados, o por intensidades o por no parar nunca,etc.
Para mi el mejor entreno previo a una victoria fue rotura de clavicula,mes y medio durmiendo como un osito.
Que cabezones somos!!!!!!!
¡Gracias!
Puto amo!!!!
Gracias jaime, gracias a esto cuando por causas familiares no pueda entrenar, me acordaré de ti, y diré .- Ehhh, que estoy asimilando!!!, tan importante o más como entrenar.
[…] 3 de marzo de 2011 hice esta entrada sobre el volumen. Lo he recordado mientras escribia unas lineas sobre el entrenamiento basado en la […]